Fue Boedo una parte importante de esa música nuestra que rebalsó los límites para identificar a los argentinos: el TANGO; todo verso resultó por sus calles escuchado, toda canción respetada, y todo sacudiendo las fibras de los hombres del lugar. También por los alrededores, se encuentran aún testigos mudos de un pasado rico en aconteceres, los viejos cafés de Boedo, con literatos, con hinchas de fútbol, con añejos guapos y malandrines.
Te invito a que los recordemos entonces, reviviendo a partir de la palabra y de la música que nos ambientará, nostálgicas vivencias. De todo esto y muchísimo más hablaremos el próximo lunes 22 de junio, en otro de nuestros programas especiales que le estamos dedicando a otro de los barrios de nuestra querida Buenos Aires.
y desde Boedo, algunos programas de radio ya están haciendo historia...
ResponderEliminar¡Muy bueno el sitio!
Adrián